Mujer Muralla

Una Muralla en la Biblia se refería a una protección, pero también era un símbolo físico importante del establecimiento de los judíos como nación. Una vez que Nehemías supo cuan vulnerable era Jerusalén, lo primero que hizo fue orar a Dios y ayunar durante 4 meses. Se le dio la fuerza y el coraje para hacer una petición al Rey y se le concedió su petición de reconstruir el muro. (Nehemías 2:17; Nehemías 4:6,13-18

Muralla = pared alta y de gran grosor que rodea una fortaleza o una ciudad, para su protección. Su función sirve para aislar una población, separar territorios o cerrar un sitio. Esta clase de muro también permite establecer un limite o una frontera. Por lo general, se construye con rocas y ladrillos, que son materiales muy resistentes. Estas paredes de buena calidad proporcionan resistencia y estabilidad, resistencia a la intemperie, al fuego, aislamiento térmico y acústico.

Algunas murallas que se volvieron famosas en la historia lo son: la Gran Muralla China, el Muro de Berlín en Alemania, la Muralla de Adriano en Inglaterra y el Muro de las lamentaciones de Jerusalén lo cual fue una muralla gloriosa para el pueblo de Dios; entre otras mas alrededor del mundo.

Ahora, ¿de donde viene el decirte que somos Mujer Muralla? Viene de Genesis cuando fuimos la idea de Dios en ser mujeres idóneas. No pases por alto nunca que somos el pensamiento y diseño de Dios, fuimos diseñadas para ser solución y no problema. Somos diseñadas para cumplir un propósito especifico entre muchos otros diseños. Fue Dios mismo quien dijo: la hare ayuda idónea. ¿Que tiene que ver con la muralla?

Ayuda = rodear, proteger. Idónea = un frente, parte opuesta, antes.

Sabias que además de llevarle la contraria a nuestro esposo, llevarle la contraria a muchas personas, cosa que lo hacemos muy bien, tal y como Dios nos ha diseñado… ¡jaja! Dios nos llama a ser murallas, a proteger y a ser un frente ante nuestro hogar, nuestra familia, nuestro esposo e hijos… quien sea que tienes detrás de ti. Dije muralla, no dije verja, no dije pared, rejas, no dije terraplén… ¡MURALLA! Una barrera, un frente, un muro de contención, fortificación alta, una defensa.

No se como te sientes hoy, o como te miras, o en que forma estas como ayuda idónea y no solo me quiero referir como esposa…no, no, como mujer de Dios, lo que sea que tienes que proteger, así sea tu misma. Primero debes cuidar de ti, fortalecer tu cimiento, tu muralla para así darle protección a lo demás que está detrás de ti. ¿A quiénes estas guardando entre tus muros? ¿Cómo estas protegiendo el diseño de Dios en tu vida, tu llamado? ¿Cómo esta tu muralla hoy? ¿Necesita una reconstrucción, como en los días de Nehemías?

Mujeres, es tiempo de levantarnos como murallas, como la primera línea de defensa a lo que Dios nos ha entregado y nos ha posicionado en frente de, delante de… Sin importar lo que hable o las amenazas de Sanbalat y Tobías, si Dios aprueba, si Dios hablo… vamos a levantarnos en fe y en la victoria de la cruz, llenas de autoridad e identidad en Jesús para cumplir parte de nuestro diseño original como ayuda idónea.

Restaura de ser necesario, extiende de ser necesario, refuerza de ser necesario, hazla nueva de ser necesario…pero por favor haz algo a favor de tu muralla.

Proverbios 25:28 - Como ciudad derribada y sin muro Es el hombre cuyo espíritu no tiene rienda.

Vamos como Nehemías ayudarnos unas a las otras… vamos a pelear con una mano y la otra trabajar en la muralla. Vamos a cuidarnos las espaldas unas a la otra, tomemos turnos. Si una está débil para pelear vamos a reforzar esa área, si alguna esta débil para construir vamos a pelear a favor de ella. Vamos a estar en pie en esta noche y vamos, como Dios me mostro, espalda con espalda o fortalecer la muralla. Todas juntas reconstruyendo la muralla de la cuidad en amor y piedad.