Operando desde el Corazón de Dios

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un corazón rojo 3D con una corona pequeña arriba

Hebreos 4:12: - “Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón”.

Hebreos 8:10: - “Por lo cual, este es el pacto que haré con la casa de Israel Después de aquellos días, dice el Señor: Pondré mis leyes en la mente de ellos, Y sobre su corazón las escribiré; Y seré a ellos por Dios, Y ellos me serán a mí por pueblo”.

Hebreos 3:12:“Mirad, hermanos, que no haya en ninguno de vosotros corazón malo de incredulidad para apartarse del Dios vivo”.

La Palabra de Dios


Quisiera comenzar este mensaje enfatizando la necesidad que tenemos de verdaderamente ser transformados por la Palabra de Dios. Un cristiano que comienza su nueva vida en Cristo, por cualquier otra razón que no sea la Palabra de Dios, está en riesgo de correr mal, y no terminar la carrera.

Las emociones cambian, las emociones vienen y van, las circunstancias cambian, para bien y para mal, pero la Palabra de Dios permanece para siempre. Cuando es la Palabra de Dios la que ha provocado el cambio en nuestra vida, solo entonces, caminamos en la convicción y la seguridad, de poder terminar la carrera correctamente.

La Palabra de Dios remueve el Espiritu de Temor, la Palabra de Dios remueve el Espiritu de Cobardía, y lo cambia por un Espiritu de Poder, de Amor y de Dominio Propio, 2 Timoteo 1:7, esos son algunos atributos de su nueva vida espiritual.

El Espiritu de Temor son las cosas que tratan de intimidarnos desde afuera, pero el Espiritu de Cobardía son aquellas cosas que nos tratan de intimidad desde adentro. Cuando aprendemos a controlar nuestras emociones, o cuando, permitimos que Dios tome el control de nuestras emociones, entonces podemos enfrentar todos aquellos miedos y temores que llegan a nuestra vida de dentro de nosotros mismos y de fuera de nosotros mismos.

El hombre y la mujer natural son esclavos de estas emociones, de estos miedos, pero los que han sido transformados por medio del Espiritu y de la Palabra, entonces pueden seguir adelante y cumplir con la voluntad y propósitos divinos, por encima de estas emociones y miedos.

Por eso es tan importante el fundamento que usted ha puesto en su vida, el fundamento que usted ha permitido en su vida. Porque muchas veces no somos capaces de construirlo nosotros mismos, pero permitimos a Dios que el lo haga, por muchos otros medios que el tiene para ayudarnos.

No hay nada más bonito, ni más efectivo, que operar en la visión de Dios, de poder entender y sentir que hay dentro del corazón de Dios para querer cumplirlo y alcanzarlo.

Todos sabemos que la función del corazón es el de bombear sangre a todos los órganos y sistemas del cuerpo, Dios no tiene un cuerpo natural para que su corazón funcione de esa forma. Sino que cuando hablamos del corazón de Dios, hablamos de sus deseos, de sus planes, de sus propósitos, de su voluntad.

El gran problema que hemos tenido siempre es que para nosotros es mas importante que hay en nuestro corazón, que lo que hay en el corazón de Dios.

Permítame volver a recordarle que solo tenemos una oportunidad en la vida para lograr esto. Que, si tratamos de vivir la vida a nuestra forma, poniendo a Dios como un florero, aquí y allá, para que adorne nuestra vida y la haga más agradable, entonces no estamos operando desde el centro del corazón de Dios, sino desde nuestra imaginación.

Los textos que leímos al principio en el Libro de Hebreos nos hacen varias advertencias claras:

  • La Palabra de Dios es una espada
  • Para ser Pueblo de Dios, su Palabra tiene que estar en nuestro corazón
  • No nos apartemos del Dios Vivo por incredulidad

muchos papeles juntos que parecen bien viejos

¿Porque la Palabra de Dios es una espada?

No solo porque con ella luchamos, sino porque entra dentro de nosotros y corta, arranca, separa de nosotros, todo lo que Dios no quiere en nosotros. No dice que la Palabra de Dios es un Bisturí, que nos lleva a una Sala de Operaciones Espiritual y nos ponen anestesia, para operarnos delicadamente de algo que no pertenece al cuerpo. Lamentablemente, muchas veces la Palabra de Dios hiere, arranca, cercena, aquello que Dios no quiere en nosotros.

Esta espada, de su Palabra, tiene que estar en nuestro corazón. Esto significa, amarla realmente, no se trata de tener la Palabra en los labios, sino de tenerla en el corazón. Isaías 29:13: “Dice, pues, el Señor: Porque este pueblo se acerca a mí con su boca, y con sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mí, y su temor de mí no es más que un mandamiento de hombres que les ha sido enseñado”

En este lugar se enseña la Palabra, se enseña del temor a Jehová, se ensenñan los Mandamientos, pero por nada queremos que eso solo sean enseñanzas académicas que no encuentran lugar dentro de usted. Queremos que el mensaje, la enseñanza, la adoración, la predicación, se lleven a cabo de forma espiritual, para que el efecto que provoca en su vida sea real.

“Mas en cualquier ciudad donde entréis, y no os reciban, saliendo por sus calles, decid: Aun el polvo de vuestra ciudad, que se ha pegado a nuestros pies, lo sacudimos contra vosotros. Pero esto sabed, que el reino de Dios se ha acercado a vosotros. Y os digo que en aquel día será más tolerable el castigo para Sodoma, que para aquella ciudad”.

Cuando la Palabra de Dios realmente ha hecho morada en nosotros, vivimos con un temor reverente para no ofender ni separarnos nunca de Dios. Al contrario, queremos cada día acercarnos más, conocerle más, adorarle más, obedecerle más.

La obediencia se convierte en el principal atributo de los hijos, por cuanto la obediencia es la acción que proviene de la fe.

La Fe viene por el oír la Palabra de Dios y la obediencia es la acción de creer y caminar en esa Palabra. Primero escuchamos lo que Dios tiene que decir a nivel general a todo su pueblo, para cuando alcanzamos la relación es la correcta, escuchar sus instrucciones específicas para mi vida.

No podrá haber instrucciones especificas hasta que sea probado que seremos de bendición al Pueblo de Dios y no solo a nosotros mismos. La relación intima de Dios con sus siervos, es para con aquellos que conocen su corazón y que anhelan cumplir sus sueños. (Entiéndase de nuevo, que cuando hablamos de sus sueños hablamos de sus deseos, sus planes, sus propósitos y su voluntad).

Cuando nos atamos a este sistema, al Sistema de Dios, somos grandemente bendecidos, porque Dios esta comprometido con lo que el mismo estableció, y cuando lo que el establece, se vuelve nuestro mayor deseo y satisfacción, entonces estamos atados a sus bendiciones y sus promesas.

Operar desde el Corazón de Dios, trae paz y seguridad, pero también trae prosperidad, abundancia, propósito y cumplimiento. Cuando tu le das una orden a tu carne de que se someta a Dios, Dios le da una orden a todo lo demás en tu vida, para que se alinee a tu favor. (Salmos 37:3-6)

¿Cuántos necesitan que Dios de esa orden a su vida? ¿Cuántos necesitan alinearse a lo que Dios quiere y anhela para nuestra vida? Pues hoy puede ser el día, si realmente estas dispuesto/a a comprometerte con el Señor. Sin un compromiso, sin un pacto con Dios, no podremos caminar con él, pues no pueden andar dos juntos si no estuviesen primero en un acuerdo.

Si solo tu puedes andar con Dios cuando estas en la iglesia y no cuando estas en tu casa, algo anda mal. Dios quiere caminar contigo siempre, donde quiera que tu vayas. (Josué 1:5-9)



Sobre el Autor
El Apóstol Vargas es fundador de varios ministerios, donde la educación cristiana es uno de ellos. El es Coach Cristiano, Capellán, y un Maestro de la palabra de Dios. Su libro publicado más reciente es Mentoría Generacional.